ANIMACIONES DESPUÉS DE LA LECTURA DEL LIBROLos niños deben haber leído el libro antes de realizar la animación (no más de 15 días
antes). Antes de empezar recordaremos los datos del libro y dejaremos que los niños comenten
libremente lo que más les ha gustado.
Después se explica que se van a enseñar unos dibujos de objetos pertenecientes a los
personajes del cuento y que ellos deben mirar en silencio pensando de quién puede ser
cada objeto.
Se vuelven a enseñar luego preguntando: ¿Esto de quién es? y dirigiendo la pregunta a
un niño distinto cada vez. Si no sabe contestar le pueden ayudar sus compañeros y como
último recurso se busca en el libro.Los niños deben haber leído el libro anteriormente, o bien puede leerlo el animador
invitando a los niños a seguir la lectura a través de las ilustraciones.
Una vez leído el libro, el animador dejará que los niños comenten lo que más les ha
gustado.
Se dejan caer del libro las cartulinas con las ilustraciones. Los niños tendrán la sensación
de que el libro se ha roto y en general se precipitan a recogerlas, el animador advertirá
que sólo puede cogerse una.
Se pedirá a los niños que la estudien en silencio pensando si pertenece o no al libro que
hemos leído y a qué parte del libro corresponde.
Después se pregunta individualmente a cada niño, dejando que enseñe a los demás su
ilustración, si algún niño no sabe los compañeros pueden ayudarle y si no hay ninguno
que identifique la ilustración se recurre al libro. Si los niños son pequeños el animador leerá el libro en voz alta si son más mayorcitos
pueden leer el libro con anterioridad.
Antes de empezar la animación se dejará que los niños comenten el libro diciendo lo que
más les ha gustado.
Después se repartirán las cartulinas y se pedirá a cada niño que identifique el objeto o
personaje. Es preferible que cada niño elija su cartulina.
Una vez que todos los niños tengan su cartulina se volverá al leer el libro. Cada vez que
se nombre el personaje u objeto el niño levantará su cartulina diciendo: ¡Aquí está!. El animador leerá el libro en voz alta mientras los niños siguen la lectura a través de las
imágenes. (Se puede hacer que los niños lean el libro con anterioridad.)
Se deja que los niños comenten lo que más les ha gustado del libro.
A continuación, se eligen tantos niños como personajes tenga el cuento. Cada niño
representará un personaje. Volcaremos la caja o maleta y los demás niños irán eligiendo
un objeto.
Cada niño entregará el objeto que ha cogido al compañero que esté interpretando al
personaje al que pertenezca el objeto y le dice: Toma, esto es tuyo. Una vez repartidos todos los objetos a los personajes se comenta si están bien y se
rectifica lo que esté equivocado hasta que cada personaje tenga los objetos correctos.- Te la digo, te la explico
Los niños deben haber leído el libro con anterioridad (no deben pasar más de quince días
desde la lectura del libro). Antes de empezar la animación dejaremos un tiempo para
recordar los datos del libro y dejar que los niños comenten lo que más les ha gustado.
Después se reparten las tarjetas, se deja un tiempo para que los niños las lean en
silencio. Pasado este tiempo se pide a cada niño que lea su tarjeta y diga cuál es la
solución de la adivinanza.
Si no la acierta pueden ayudarle sus compañeros.Los niños habrán leído el libro con anterioridad.
Antes de empezar la animación se dejará un tiempo para que los niños comenten lo que
más les ha gustado.
Después se reparten las cartulinas y se pide a los niños que las lean en silencio buscando
la frase que no corresponde al libro.
Pasado un tiempo (5 o l0 minutos) cada niño leerá su cartulina y nos dirá qué frase es la
falsa. Los niños deben haber leído con anterioridad el libro. Antes de empezar la animación
dejaremos que los niños comenten lo que más les ha gustado del libro.
Para comenzar los niños se colocarán de píe o sentados, pero formando una fila (también
puede hacerse en círculo). Se reparten las cartulinas. Se deja un tiempo para que los
niños lean en silencio la cartulina. Después el primer niño lee su cartulina en voz alta,
luego lo hará el segundo que se quedará en su lugar o se pondrá delante del primero,
dependiendo de si su texto va antes o después del texto de su compañero. De esta forma
se van colocando los niños hasta conseguir el orden correcto. Una vez conseguido
pueden volverse a leer las cartulinas para ofrecer una visión cronológica del libro.El animador explicará a los niños que cada día les irá dando pistas con las que deben
encontrar un libro de la biblioteca de aula.
Cada día dejará en el corcho de la biblioteca la posta: Fragmento del libro, personaje,
nombre del autor, nombre del ilustrador, ...
Los niños pueden ayudarse para descubrir el libro del que se trata.
El último día el profesor pedirá a los niños que digan cuál es el libro misterioso.Los niños y niñas que toman parte en el juego pueden haber leído el libro o el cuento
fijado, pero no es necesaria su lectura previa. La animación se desarrolla así:
1. Llegado el momento de la animación, los participantes se colocan en círculo cerrado. Al
menos los cinco primeros lectores que han de tener el libro en la mano. El animador o
animadora y uno de los participantes se sitúan fuera del círculo, en lugares opuestos.
Ambos llevarán sus silbatos colgados del cuello.
2. El animador o animadora explica que se han reunido para leer todo el mismo libro en
voz alta, por turno, uno tras otro, y que luego la comentarán. Deben leer sin cometer
falta de lectura.
3. A una señal del animador o animadora, el chico/a que se ha elegido para iniciar la
lectura empieza a leer en voz alta. En cuanto comete la primera falta lectora, el que le
sigue, situado a la derecha, y que a partir de ahora llamaremos "el inmediato", dice:
"¡Alto!" y continúa leyendo él a partir de la equivocación.
Si el lector/a no se equivoca, el animador o animadora a los noventa o cien segundos toca
el silbato dos veces, para que siga la lectura el inmediato. Hay que tener en cuenta que
las faltas lectoras serán las habituales: decir mal una palabra, no hacer punto donde lo
hay, pronunciar mal un nombre, suprimir una interrogación, pararse donde no hay ni punto
ni coma, leer un singular en plural...
Si el lector/a de turno comete una falta y si el inmediato/a no se ha dado cuenta, el chico/a
que está fuera del círculo señala la falta con una pitada y el inmediato/a, que debería
haberla señalado, queda descalificado y sale del círculo para ir al rincón.
Si tanto el inmediato/a como el que está fuera del círculo no han señalado la falta, el
animador o animadora dará tres pitadas y el que queda descalificado/a es el chico/a que
está fuera del círculo, ocupando su lugar uno de los participantes (mejor si es uno/a que
ya haya leído).
Si el grupo es poco numeroso, puede permitirse que cada uno/a acumule dos faltas. El/la
que sale del círculo de lectores/as debe escribir su falta en la pizarra para comentar
después.
Al terminar la lectura se comenta lo leído.El juego consiste en presentar una lista con los personajes reales que se citan en el libro y
otros inventados por el animador o animadora, incluidos a modo de cuña.
1. El animador o animadora reparte la hoja con la totalidad de los personajes y les da
tiempo para leerla en silencio.
2. Cuando se supone que los chicos y chicas han asimilado la lista, a cada uno de ellos se
les pide que marquen con una cruz los personajes que aparecen en el libro.
3. Una vez terminada de marcar la lista, cada uno dice en voz alta los personajes que
están y los que no están.
Para ayudar a comprobar la veracidad de cada respuesta, el animador o animadora
pedirá que indiquen en qué pasaje del libro aparece cada uno. Esto obliga al chico a
observar los detalles, a saber leer valorando hasta los personajes que aparecen en
situaciones insignificantes.
También se puede hacer con objetos significativos que aparecen a lo largo del libro.El animador o animadora ha de tener bien aprendida la clave de las preguntas, para
actuar acertadamente en la sesión.
1. Con antelación los niños y niñas habrán leído el libro. En atención a la edad, hay que
procurar que la lectura sea reciente, no de un mes antes.
2. Se resume el cuento, haciendo hincapié en aquellas cuestiones que se quieren
destacar personalmente.
3. A continuación el animador o animadora reparte las tarjetas, con una pregunta en cada
una. Se creará un clima de silencio para que cada animador o animadora pueda leer
con atención su pregunta y preparar la respuesta. Cuando el animador o animadora
comprende que todos los niños y niñas se han enterado de la pregunta, pide la
respuesta de uno en uno. El animador o animadora deberá contestar sin mirar el libro.
Pero también debe saber contestar la pregunta que le ha correspondido. Si otros niños
y niñas la saben, la pueden contestar sin más trascendencia.
4. Al final el animador o animadora resume la sesión y hace un comentario. Se emplearán las técnicas propias de un coloquio:
1. Los asistentes en su totalidad (o al menos un 80%) habrán leído el libro fijado para esta
animación.
2. Esta lectura previa será individual y se realizará con suficiente antelación, para que se
pueda participar en el coloquio; pero no será tan distante que los niños y niñas hayan
olvidado el libro. Sería ideal dentro de los quince días anteriores.
3. Se empieza contando el argumento, cosa que realizan los participantes. Suele dar
buen resultado que lo cuenten entre seis participantes, actuando por relevos.
4. Cuando los seis voluntarios han terminado el argumento se pregunta si algo ha
quedado sin decir, se concreta el argumento y se subsanan las omisiones si las ha
habido, evitando siempre que los chicos y chicas se interrumpan unos a otros.
5. Se entra de lleno en el diálogo, invitando a los participantes a la valoración de los
contenidos: qué ha gustado más, qué ha gustado menos, qué les pareció lo más
divertido, lo más profundo, lo más real, lo más misterioso, lo más aburrido, lo más
maravilloso...
6. Se invita a los niños y niñas a establecer una comparación entre lo leído y la vida real y
su problemática, evitando tocar problemas personales.
El animador o animadora presenta el libro o cuento y hace una pequeña introducción al
mismo y someramente a la historia que narra. Terminado esto:
1. Explica el texto íntegro del cuento.
2. Cada equipo debe ordenar el texto, teniendo en cuenta todas las pistas que ha dado el
animador o animadora y la que le proporcione el texto, el orden del texto debe tener
coherencia y nunca debe sobrar ningún trozo.
3. Posteriormente, y una vez se haya acabado de ordenar el texto, se empieza a leer por
grupos, parándose siempre que surja alguna duda al respecto, duda que será
solucionada por el animador o animadora.
4. Una vez finalizada la lectura del cuento se comentan las dificultades que ha tenido
cada grupo, y se pueden comentar aquellos aspectos del cuento, o bien aquellos
aspectos del vocabulario, que en opinión del animador o animadora puedan ser más
interesantes.
Consiste en encontrar y explicar cómo son los personajes principales del libro leído, a
través de la indumentaria de cada uno, del aspecto físico que tienen y de los sentimientos
que demuestran.
1. Para iniciar el diálogo el animador o animadora formula una pregunta: ¿quiénes son los
personajes más importantes de este libro? Se aceptan o rechazan en equipo, hasta
determinar los principales.
2. Determinados estos personajes se da un tiempo para que los chicos y chicas digan
cómo van vestidos. Se puede hacer calas en el libro.
3. Resuelto el punto anterior, se pasa al aspecto físico que tienen y lo que éste puede
expresar.
4. En último lugar se analizan los sentimientos que se descubren a través de las distintas
actitudes. Se debe huir de hacer una historia de buenos y malos.
5. Se comenta todo esto.
1. Dadas las hojas -un juego completo a cada participante- éstos deben leerlas
individualmente y determinar cuál de ellas responde al argumento de verdad.
2. Se conceden unos minutos para que puedan leerse en silencio.
3. El animador o animadora pide a cada uno que vaya expresando su opinión y que diga
las razones por las cuales ha llegado a esta conclusión.
4. El animador o animadora no dará la solución verdadera hasta que todos los chicos y
chicas hayan opinado.
5. El último paso puede ser analizar si hay carencias, incluso en el argumento dado por
bueno.
El animador o animadora, unos días antes del fijado para la animación, organiza a los
participantes en dos equipos y les explica en qué consiste la estrategia.
Cada miembro del equipo interrogará a otro miembro del equipo contrario sobre un tema o
situación que aparezca en el libro. Puede ser una escena, un diálogo, un pensamiento,
una frase, una respuesta, etc. Si el oponente contesta bien, gana un punto. Si no, pierde
un punto.
Los jugadores de cada equipo se reunirán previamente entre sí con su portavoz, que
elegirán entre ellos, y pondrán en común las preguntas que cada uno ha preparado para
participar; seleccionadas, se realiza el juego el día señalado en estos tiempos:
1. Colocados los dos equipos uno frente a otro, el animador o animadora se sitúa de
árbitro junto a los dos grupos, de forma que pueda oír y ver a ambos equipos.
2. Dada por el animador o animadora la orden de empezar el primer chico de un equipo
hace su pregunta. Contesta el primer chico/a del equipo contrario, si sabe. Si hay
respuesta válida, el árbitro, el animador o animadora anota un punto a favor del equipo
que ha respondido bien.
3. Entonces el chico preguntado interroga al que le preguntó, con una de las preguntas
que tiene preparadas. Si contesta favorablemente gana un punto para su equipo. Así
discurre la animación hasta que todos los participantes de uno y otro equipo hayan
tenido la ocasión de preguntar y de ser preguntados.
4. Pueden establecerse varias rondas completas si el número de participantes y el tiempo
lo permiten, y también si el libro -extensión, contenido- ofrece posibilidades para hacer
tantas preguntas. Si no, se deja en dos rondas o en una sola.
5. Cuando han terminado los dos equipos, el árbitro lee la puntuación que ha conseguido
cada uno. Por cada pregunta no contestada el equipo pierde un punto y por cada
pregunta contestada el equipo gana un punto. Entre otras cosas, la puntuación final.
Preparado el material y leído previamente el libro por todos, la animación se lleva a la
obra de la siguiente manera:
1. El animador o animadora o los participantes hablan con brevedad del argumento,
solamente para recordar la obra a los participantes.
2. Se reparten folios o cartulinas a cada participante o en grupos. Cada chico o cada
grupo se pone a confeccionar en cada cartulina o folio la descripción de cada
personaje, las características, los aspectos físicos, psicológicos...
3. Una vez acabado de elaborar este material, cada participante o cada grupo va leyendo
la descripción de cada personaje con todos sus rasgos sin decir de quién se trata para
ver si a través de estos rasgos los otros participantes o los otros grupos adivinan de
qué personaje se trata.
4. Cada chico o cada grupo debe ir completando el personaje diciendo los rasgos que le
faltan.
5. Cuando han intervenido todos los asistentes, el animador o animadora pregunta en
general qué personaje es el más atractivo, el más noble, el más generoso, el más
limpio, etc., con el fin de destacar las cualidades más importantes del mismo.
- Y después del final, ¿qué?
Una vez leído un libro, adecuado a los intereses y edad de los participantes en el juego,
se comenta. Una vez hecho esto el animador o animadora divide el grupo en tantos otros
subgrupos como finales quiere que se haga.
1. Cada uno de los grupos debe inventarse otro final, teniendo en cuenta el final del libro.
Cada grupo lo hará según una clave: humor, tragedia, drama... Tantos como el
animador o animadora quiere que se hagan.
2. Después se leerán los finales de cada grupo.
3. Se comentarán los fallos y las virtudes de cada uno de los nuevos finales.
El animador o animadora explicará por qué ha escogido el libro en cuestión y qué
pretende hacer. Contará en qué consiste un debate y cuáles son las reglas del mismo.
1. Se comentará el libro leído entre todos y todas.
2. Del comentario saldrá el tema o los temas sobre los cuales decidimos debatir. Si no se
llega a un acuerdo, el animador o animadora tratará de ayudar a los participantes a
elegir o bien hará la elección democráticamente.
3. Se efectuará el debate. El animador o animadora hará de moderador del aquel y habrá
un participante que hará de secretario para recoger las ideas más importantes que se
vayan sacando del debate.
4. Al final, entre todos y todas, se llegará a unas conclusiones.
5. El animador o animadora hará un resumen de la sesión y un comentario.
Después de leer un libro o contar un cuento construimos un tablero. El número de casillas
dependerá de la extensión del libro y del nivel de los niños.
Rellenaremos las casillas con nombres de personajes, animales, objetos, etc., que
aparecen en el cuento.
La primera vez el tablero se hará en la pizarra y se trabajará a nivel oral.
Posteriormente cada niño puede construir su tablero y trabajar por escrito con él.
Para trabajar el tablero se elige un número y una letra dos veces, de forma que
seleccionemos así dos casillas.
Con las palabras de las casillas podemos crear: frases, títulos, historias cortas.
OTRAS FORMAS DE ANIMAR A LEER
Una forma muy sencilla de animar a leer es a través de la publicidad que hagamos de los
libros, de la utilización de la biblioteca y de la lectura en general. Esta publicidad pueden
llevarla a cabo tanto el animador como los mismos niños y es adecuada para cualquier
nivel educativo.
A continuación enumeramos algunas maneras de hacer publicidad.
Se pueden hacer anunciando un libro concreto, animando a la lectura en general o
explicando el uso de la biblioteca.
Es conveniente que los hagan los niños, trabajando primero oralmente las frases que se
van a escribir, las ilustraciones y su distribución.
Una vez realizados se expondrán en la clase, en la biblioteca o en los pasillos.
El animador dirá título, autor, editorial de un libro y hará un breve resumen del
argumento.
- Los niños podrán decir qué libro les ha gustado más y por qué.
- Podemos clasificar los libros con determinados signos previamente acordados con los
niños (estrellas, colores, rombos), de forma que puedan expresar de forma graduada
cuánto les ha gustado el libro.
- La autobiografía lectora: especialmente indicado para el tercer ciclo de Primaria y
Secundaria. El alumno contará sus experiencias lectoras a lo largo de su vida.
- Buzones de cartas: se dejan tres cajas (pueden ser más o menos) decoradas
convenientemente. Una será el buzón de las cartas de autores, otra de personajes y la
tercera de ilustradores.
Cada niño después de leer un libro se pondrá en el papel del autor, personaje o ilustrador
y escribirá una carta a sus compañeros recomendando el libro.
De vez en cuando, cuando el profesor lo considere oportuno, se sacará una carta de cada
buzón y la leerá en voz alta.
El profesor o el animador lleva un libro a clase y lo deja en la mesa de un alumno sin decir
nada, esperando que sea el niño quien lo hojee, quien pregunta
Con música de fondo se grabarán frases del libro de manera que ofrezcan una visión
generalizada de la obra -a partir de 5º pueden hacerlo los niños, eligiendo el libro que más
les haya gustado.
Puede resultar una buena forma de animar a leer que los niños oigan lecturas expresivas
de poesías y narraciones.
Estas grabaciones pueden realizarlas los animadores, aunque existen algunas de autores
españoles en el mercado. También se puede trabajar en la clase la grabación de poesías
y narraciones con fondo musical.
En el Tercer Ciclo de Primaria se puede dejar libertad a los niños para que, por equipos,
elijan los textos que desean grabar.
En las grabaciones podemos utilizar algunos recursos que las hacen más atractivas:
- Utilizar coros para los estribillos.
- Leer cada estrofa una persona distinta.
- Dramatizarlas cuando sea posible.
Se puede pedir a los niños que realicen en cartulina señaladores de lectura tomando
como referencia los objetos o los personajes de los libros que han leído.
Los niños pueden intercambiarse estos señaladores o realizar una exposición con todos
ellos.
Se pueden utilizar los libros de la biblioteca de aula o los que los niños traigan de casa.
Se exponen y se realiza una votación para elegir:
- La mejor portada.
- El libro más bonito.
- El libro mejor ilustrado.
Al libro premiado se le puede poner una medalla y colocarlo en un lugar preferente de la
biblioteca.
- La lectura y la narración en voz alta
Es muy corriente en los primeros años infantiles que los padres o educadores cuenten y
lean en voz alta historias a los niños, sin embargo, cuando los niños empiecen a ser
mayores dejamos de contar o leer historias porque nos parece que deben ser ellos
mismos los que lean. Nuestra experiencia nos ha demostrado que la narración o la lectura
en voz alta es un medio muy eficaz de acercar a los niños a los libros independientemente.
El hablar de los libros leídos, intercambiar impresiones y opiniones sobre ellos es una
forma de hacer lectores más críticos y reflexivos y será un buen método de trabajo a partir
de tercero.
Podemos empezar por dialogar sobre un tema de interés para nuestros alumnos, dejando
que haya un libre intercambio de opiniones. Al final del coloquio se recomendarán libros
que tratan el tema debatido.
Se puede presentar la situación del libro haciendo que los niños se conviertan en
protagonistas y pidiéndoles que expliquen como actuarían ellos en esas circunstancias.
Después el animador presentaría el libro del que, sin saberlo, hemos estado hablando.
Los alumnos también pueden convertirse en animadores si, después de leer un libro,
realizan una entrevista imaginaria (a ser posible caracterizados) al autor, a los personajes,
al mismo libro... dejando que luego los alumnos espectadores también hagan preguntas.
Para que no resulten una carga para los niños, convirtiéndose en motivo de alejamiento
en lugar de acercamiento a los libros, deben cumplir algunas condiciones:
- Serán lo más sencillas posibles.
- Tendrán carácter voluntario.
- Su objetivo será orientar a futuros lectores de ese libro, no evaluar a quién ha realizado
la lectura.
Algunos apartados que puede incluir una ficha de lectura serían:
- Título.
- Autor.
- Editorial.
- N.º de páginas.
- Clasificación personal del libro (con dibujos previamente acordados).
- Hablar de un personaje.
- Vocabulario: palabras nuevas.
- Nivel de lectura: alto, medio, bajo.
- Apartado libre.
No conviene realizar fichas antes de quinto curso.
Siempre resulta atractivo y motivador para los niños conocer a los autores de los libros
que leen. La mayoría de las editoriales ofertan a los centros este tipo de encuentros, la
tarea del animador o del profesor consistirá en elegir el libro y el autor más adecuado.
A todos los niños les gusta coleccionar cromos. Nosotros proponemos una colección de
poesías.
Vamos a trabajar con tres clases de 30 alumnos y una colección de nueve poesías.
Elegiremos nueve poesías. De cada poesía prepararemos una ficha, en la que la poesía
se repita nueve veces (nueve cromos repetidos) y haremos diez copias. Distribuiremos las
copias por las clases de forma que para completar la colección los niños tengan que
cambiar las poesías que les hemos proporcionado con todos los compañeros del nivel.
- 8.7- Los padres y la animación a la lectura
Está fuera de dudas la importancia que tiene la colaboración de los padres en la tarea de
hacer niños lectores.
Es necesario comentar a los padres, bien mediante circulares o en reuniones de tutoría,
cómo pueden ayudar a sus hijos para que se acerquen a la lectura.
Algunos consejos pueden ser:
Para los más pequeños
- Cuente historias a sus hijos, lea cuentos en voz alta siempre que le sea posible.
- Cuente historias de su familia, enséñele refranes, adivinanzas, canciones de corro,
trabalenguas.
- Lea fragmentos de cuentos y libros a sus hijos y deje que ellos continúen la lectura. Si
el niño se cansa, lean a medias: un renglón usted, un renglón el niño.
- Deje que el niño le lea a usted o le cuente cuentos.
Para los mayorcitos
- Forme una biblioteca para sus hijos con libros apropiados a su edad y que estén de
acuerdo con sus intereses y necesidades.
- Persuada a sus hijos para que gasten una parte del dinero que les da para sus
necesidades (paga) en libros.
- Participe en las lecturas de sus hijos, hable con ellos acerca de lo que han leído y
sobre lo que les gusta de sus lecturas.
- Ayúdele a ser responsable si utiliza algún servicio de préstamo de libros (Bibliobús,
biblioteca de aula o de centro) para que cuide los libros y los devuelva a tiempo.
El profesor también debe informar a los padres sobre las normas de préstamo de libros,
pidiéndole que ayude al niño a cumplirlas. También puede recomendar a los padres libros
adecuados para su hijo, especialmente en Navidades o final de curso, tiempos adecuados
para regalar libros.